A quién no le ha pasado que va caminando por la calle y de repente Plaf!, pisó una sorpresa de perro, o parado en la calle y de repente Pum!, una de pájaro en la cabeza. De hecho que a muchos y me incluyo.
Pero no todos lo tomamos igual, por ejemplo, me he dado cuenta que la persona que pisa sorpresa de perro y se molesta, reniega, patalea y hasta busca al perro para denunciar al dueño, tiene plata; en cambio, los que al ocurrirles esto simplemente esbozan una leve sonrisa y siguen caminando orgullosos, a veces hasta sin limpiar la gracia, son los que no tienen ni un sol en el bolsillo.
SI PUES, ESOS QUE CREEN QUE DA SUERTE Y QUE LES TRAERÁ PLATA.
Pensé en esto porque el domingo pasado participé en una Carrera que recorría parte de la Costa Verde, una linda carrera con subidas de escaleras y un variado terreno que hizo sufrir a todos, y en la que me sucedió algo por primera vez.
Venía yo a un buen ritmo, cuando a la altura de la playa Punta roquitas sentí un golpe en el hombro y parte del pecho. Primero pensé que era una piedra lanzada por un amigo, del que no voy a decir su nombre, pero con el que siempre compito y esta vez le había sacado cierta distancia, pero al fijarme bien había sido atacado por una bandada de pajarracos malditos que al parecer me habían estado esperando para lanzarme su gracia.
Estuve a punto de molestarme, pero al contrario de eso esbocé una sonrisa y continué la carrera con mayor entusiasmo, lo que me llevó rápidamente a la siguiente conclusión: ¡Estoy misio!
Definitivamente no es normal ni fácil que un pájaro te adorne mientras corres una carrera, pero a mí me pasó, y como yo soy de los del grupo que SI cree que da suerte, inmediatamente pensé en la Tinka, pero para variar no la compré, porque también soy del grupo que se quisiera sacar la Tinka pero nunca la compra. Este fin de semana prometo comprarla.
Luego surgió una idea en mi cabeza y empecé a imaginar qué lindo sería que mi Trabajo sea correr, que me paguen por el simple hecho de correr, entrenar, ir a carreras en diferentes lugares del Perú y el mundo.
Que me paguen por hacer lo que me apasiona. Sería increíble, no?
Imagínense que te pregunten:
¿Oye y tú a qué hora entras a trabajar?
-Bueno, depende, a veces 5.30 am, otras veces 6.00 am, algunas veces 8.00 pm, la verdad depende.
Uy! pero que sacrificado, y ¿cuántas horas trabajas al día?
-Ah bueno, eso también depende de la carga de trabajo, puede ser 1 hora, 2 ó hasta 3 horas.
Y ¿Dónde queda tu oficina?
-Eso también depende, puede ser en el malecón de Miraflores, en el Pentagonito, en la Costa Verde, el Chipoco, o de verdad donde sienta ganas de trabajar ese día.
No te lo puedo creer. ¿No tienes una oficina, un jefe, alguien que revise tu trabajo?
-Bueno, lo más cercano a una oficina puede ser el gimnasio o la piscina, y lo más parecido a un jefe pueden ser: el entrenador, el nutricionista, el traumatólogo, el fisioterapeuta, etc.
Que increíble, ¿Cómo puedo hacer yo para conseguir un trabajo así?
Sólo ponte las zapatillas y siente lo que es correr, vive cada momento que puedas pasar contigo mismo o con tus compañeros de pista. Disfruta lo que le regalas a tu cuerpo con el deporte. Conoce nuevos lugares, disfruta el aire, la vista, la gente, vive más.
Pensándolo bien, creo que ya tengo ese trabajo y que ese trabajo ya me está pagando hace mucho. Tal vez no sea dinero, pero me ha dado cosas mucho más importantes. Así que puedo decir que no soy “misio”, tengo todo lo que necesito. Pero eso sí, me seguiré poniendo contento cuando un animal me sorprenda con sus gracias. Uno nunca sabe.
Te felicito Franquito! En serio está muy bueno y todo lo que dice, refleja mucho de lo que varios sentimos y no podemos expresar.
ResponderEliminarVera
Gracias Verita!... y cuando quieras.... cuenta tus suculentas anécdotas como la de la última adidas :p
Eliminarmyfriend, este fin de semana nos hacemos millonarios con todos los kilómetros que vamos a correr !!
ResponderEliminarjajajajaajaj...... hay que ir buscando Street Dogs por la ruta!
EliminarEste comentario ha sido eliminado por el autor.
ResponderEliminarFranco, otro momento de relax y reflexion¡¡ Gracias. ADELANTE
ResponderEliminarrealmente muy cierto todo lo que comentas, creo que al correr nuestra mente y nuestro cuerpo solo se deja llevar y es en ese momento cuanto mas disfrutamos de lo que hacemos porque todo fluye... gracias por compartirlo
ResponderEliminarEso es lo mágico de este deporte... a disfrutarlo!
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